sábado, 12 de julio de 2014

Cuando preveer asma en bebés

¿Cómo preveer asma en bebés?

En bebés no es detectable hasta después de varios meses, y aparece por descarte de otras enfermedades inflamatorias del aparato respiratorio. Lo ideal es hacer un seguimiento con el pediatra para su diagnóstico final.

Asma

      El asma es una enfermedad inflamatoria crónica en la que se observa un aumento de la reactividad a nivel traqueobronquial, que se manifiesta por estrechamiento difuso de la vía aérea y que se modifica espontáneamente o con ayuda del tratamiento. 
En el mundo se calcula que hay 150 millones de asmáticos y la prevalencia de la enfermedad aumenta entre un 20-50% cada década. La prevalencia y la severidad de esta enfermedad es mayor en sectores de la sociedad de menor nivel socioeconómico. Es común la presencia de enfermedades asociadas: rinitis, dermatitis atópica, eczema, pólipos nasales. También es frecuente la existencia de antecedentes familiares de asma.

¿Cúando sospecharlo?

Presencia de tos, sensación de falta de aire ( disnea ), dificultad respiratoria, presencia de ruidos audibles durante la espiración ( sibilancias ) etc, recurrentes, esto quiere decir durante los intervalos libres de síntomas el examen físico del paciente será normal. Cuando estos síntomas aparecen por la noche e interrumpen el sueño hay que pensar en mayor severidad del cuadro.

¿Cuáles son los factores de riesgo mas importantes?

El principal y mas conocido es el antecedente de atopía, la susceptibilidad que tiene el organismo de producir inmunoglobulina E frente a alergenos ambientales habituales. Existen elementos que pueden actuar como disparadores de los síntomas:

·    Alergenos ambientales: ácaros, tierra, pólenes, hongos, pelo de animales, cucarachas, secreciones de animales domésticos, etc.
·    Cambios climáticos: frío.
·    El ejercicio físico.
·    Infecciones virales o por mycoplasma Pneumoniae.
·    Exposición ocupacional a sustancias irritantes.
·    Inhalación de humo de cigarrillo, de cocinas a leña en ambientes cerrados, perfumes, aerosoles, etc.
·    Algunos medicamentos.
·    Ingesta de conservantes de alimentos.
·    Estrés psíquico.
·    Factores endocrinos.

¿Qué estudios pueden ser de utilidad para el diagnóstico?

El diagnóstico de asma se basa en la historia del paciente y su examen físico, pero también son necesarias pruebas de función pulmonar que sirven para detectar la obstrucción al flujo aéreo, la severidad de la obstrucción y la reversibilidad de la misma.
Entre las pruebas se encuentran: ( no las explicaremos )

·    Espirometría.
·    Medición del pico de flujo espiratorio.
·    Pruebas para medir reactividad bronquial.

Clasificación según la severidad del cuadro:


Esta clasificación tiene en cuenta: frecuencia de aparición de síntomas, presencia de síntomas por la noche, duración e intensidad de la exacerbaciones y resultados de estudios de función pulmonar.
De acuerdo a estos parámetros existen las formas:

·    Intermitente leve
·    Persistente leve
·    Persistente moderada
·    Persistente severa

Tratamiento:

Dentro de éste se incluyen medidas como:
·    Educación del paciente y su familia acerca de la naturaleza de la enfermedad, su evolución, etc.
·    Medidas para evitar causas desencadenantes de las crisis: no fumar, no colocar alfombras ni cortinados pesados ni almohadones ni bibliotecas ni peluches en el dormitorio de una
persona asmática, no colocar flores en donde duerme una persona asmática, evitar, de ser posible la exposición a sustancias químicas irritantes, etc. 
·    Tratamiento farmacológico: agonistas ß2 inhalatorios, corticoides inhalatorios u orales, según la severidad del cuadro.

El paciente asmático debe conocer que puede tener una calidad de vida normal con un adecuado control de su enfermedad: para ello son necesarios no solo el tratamiento farmacológico sino también la adhesión del paciente al tratamiento y medidas preventivas de la aparición de las exacerbaciones.

 Vídeo de cómo controlar el asma en 5 pasos


viernes, 11 de julio de 2014

Prevención de accidentes en bebés

Cómo evitar que tu bebé pueda tener accidentes domésticos

Los accidentes domésticos son la principal causa de muerte en los niños; afortunadamente algunos son fácilmente prevenibles:


Objetos peligrosos : aleje del alcance de sus hijos objetos pequeños o punzantes con los que se pueda atorar o lastimar : tachuelas, monedas, pilas, clips, hebillas, pelusa, etc. Inspeccione regularmente los juguetes de sus bebés : un juguete sano seguro puede transformarse en un juguete peligroso cuando se rompe. Mantenga fuera del alcance de sus niños objetos cortantes : cuchillos, tijeras, hojas de afeitar, etc. No deje vidrios rotos en el cesto de basura.

Electricidad : No deje electrodomésticos enchufados o con los cables colgando. Coloque protectores plásticos en las tomas de enchufes eléctricos. Coloque lámparas y veladores en lo alto de los muebles fuera del alcance de los bebés.

Bolsas : Aleje las bolsas de sus bebés, estos pueden tomarlas y colocarlas sobre sus cabezas provocando sofocación.

Intoxicación : Coloque los productos de limpieza fuera del alcance de sus hijos. Guarde los medicamentos en el botiquín bajo llave. Nunca le diga a sus hijos que los medicamentos son ricos. Cuando vaya a dar una medicina a su hijo, lea detenidamente el frasco del medicamento evitando de este modo la posibilidad de confundirlo con otra droga. No vuelva a usar recipientes viejos de drogas o medicamentos, deséchelos en la basura. Si debe desechar drogas no lo haga con el resto de basura , tírelo al inodoro. En caso de ingesta accidental consulte inmediatamente al centro de intoxicaciones. Para estas circunstancias tenga disponible en su hogar jarabe de ipecaguana; consulte a su pediatra acerca de cómo y cuando usarlo. El alcohol, aún en poca cantidad y el cigarrillo ingerido por vía oral pueden ser tóxicos. Aléjelos de sus bebés. Si usted ha estado fumigando, báñese y cámbiese de ropa antes de tocar a su bebé. No fumigue su casa para combatir pulgas o piojos. No le de a su hijo alimentos recalentados que hayan estado fuera de la heladera, pueden contener toxinas.

Escaleras y balcones : Coloque vallas de seguridad al comienzo y al final de las escaleras. Coloque barreras de protección en las ventanas que estén mas arriba del primer piso de manera que su bebé no pueda arrojarse por ellas.

Fuego : Use detectores de humo en su hogar, controle su funcionamiento regularmente y cambie sus baterías anualmente. Tenga en cada piso de su casa, en un lugar accesible, un matafuegos. Coloque detectores de monóxido de carbono en los dormitorios.

·     Cocina : no deje sustancias inflamables cerca del fuego, asegúrese que las hornallas y el horno estén apagados una vez que ha terminado de cocinar. Coloque los mangos de ollas y sartenes fuera del alcance de sus niños cuando están cocinando. No beba bebidas calientes cuando tiene en brazos a su hijo; puede quemarlo. No permita que su hijo juegue con fósforos : puede quemarse y desencadenar incendios.

·     Baño : evite el uso de electrodomésticos ( secador de pelo, afeitadora, etc. ) que si caen al agua o se mojan pueden electrocutar al usuario. Controle la temperatura del agua de la bañera o de la ducha antes de bañar a su bebé.

·     Habitaciones : no instale cables debajo de las alfombras : el caminar sobre ellos puede romperlos y causar incendios. No fume en la cama. Si enciende fuego en un hogar a leña : asegúrese de que la aireación es la adecuada y que la chimenea esté limpia, cuando se retire a dormir asegúrese de que las brasas estén apagadas. No use combustibles para encender el fuego. Si en la casa hay estufas aléjelas de los niños, los muebles y los cortinados. Si usa estufas eléctricas, asegúrese de que tenga apagado automático.

·     Depósitos : mantenga los productos inflamables alejados de la caldera y el calefón.

·     Plancha : no deje la plancha encendida al alcance de las manos de su hijo, puede ocasionar quemaduras severas a veces invalidantes.

·     Vaporizaciones : No realice vaporizaciones utilizando agua hirviendo, realice en su lugar, nebulizaciones o el vapor de la ducha del baño.

·     Cigarrillo : No fume si tiene a su hijo en brazos, puede ocasionar quemaduras que si bien son leves, pueden ser muy molestas.

·     Sol : No deje a su hijo demasiado expuesto al sol en playas o piletas ; esto puede ocasionar quemaduras de primer grado. Utilice siempre filtros solares que tengan alta protección ( factor 15 ) y que no se salga con el agua.

En caso de que su hijo sufra una quemadura, lave el área afectada con agua fría, cúbrala con una tela limpia, de ser posible gasa estéril, y consulte urgente a su pediatra; no utilice hielo, ni cremas, ni pomadas.



Pileta : rodee la pileta con una cerca y mantenga cerradas las puertas de acceso con llave. No deje elementos en la cercanía de la cerca que permitan a sus hijos trepar y entrar en la piscina. No zambullirse si no hay suficiente profundidad. No le coloque a la pileta deslizadores o trampolines, no son seguros para nadie. No permita carritos o triciclos en el borde de la pileta. Nunca deje solo a los niños en la pileta, la persona que esté con ellos debe saber nadar. Los juguetes flotantes no deben reemplazar a la mirada de los padres. Enséñele a sus hijos a esperar a que llegue un adulta para meterse en la piscina. Tenga en cuenta que un bebe o un niño pequeño puede ahogarse en una pequeña cantidad de agua. Aprenda medidas de primeros auxilios y resucitación cardiopulmonar para estar preparado en caso de un semi-ahogamiento. En presencia de tormentas eléctricas nadie debe estar en la pileta. No deje que su bebe trague agua de la pileta ya que puede enfermarse.

Armas de fuego : si posee armas de fuego en su hogar manténgalas alejadas del alcance de los niños guardadas bajo llave .

Si su hijo usa andador supervíselo en todo momento.

Caídas : asegure el cambiador de su bebé a la mesa cada vez que cambie los pañales a su bebé, de manera que éste no pueda resbalarse y caer al piso. Jamás deje solo a su bebé sobre la cama, o cuna sin baranda, o mesa para cambiarlo. Mantenga los objetos pesados o frágiles alejados de la cuna del bebé de modo que éste no pueda tomarlos  y ser aplastado por ellos, a su vez, evite colocar la cuna cerca de ventanas y cortinados  previniendo de esta manera la posibilidad de sofocación en el caso de que caigan sobre la cuna. Para evitar que usted o algún familiar se caiga cuando está con el bebé en brazos trate de tener luces encendidas en áreas oscuras de la casa, colóquele barandas a las escaleras si estas no las tienen, colóquele suela antideslizante a su calzado, etc. Fije los muebles a la pared, sobre todo aquellos que pueden caer y aplastar al bebé : bibliotecas, estantes,  vitrinas. Si su bebé está aprendiendo a caminar no le coloque calzado con suela lisa que pueda favorecer las caídas. Tenga cuidado con pisos resbaladizos o recién encerados.

Para ver más información pueden ver este vídeo